No hay duda de que corren malos tiempos para casi todos y
que la situación económica actual es más bien nefasta, pero siempre debemos
mantener la esperanza de que todo cambiará e irá a mejor.
Tras a acabar mi formación universitaria, la cual no
descarto que continúe en un futuro, y acceder al mercado laboral me encontré
con que tenía capacidades desarrolladas que me permitirían realizar todo tipo
de trabajos, estuvieran o no relacionados con mis estudios. Es lo que se llama
una formación integral, un poco de aquí, otro de allí,...
Pero tras un año de trabajo a media jornada el dinero se
puso por delante y se quedó ahí para no dejar nada a su paso. Se llevó mi
trabajo y el de muchos más españoles -poderoso caballero es don dinero-.
No hay, la burbuja estalló, dicen algunos. Y yo me pregunto:
¿qué burbuja? La inmobiliaria, me contestan. Y ahora es cuando yo pienso, ¿qué
culpa tengo yo de que otros derrocharan y gastasen lo que no tenían para que
ahora yo no pueda acceder a un trabajo?
Dispuesto a desplazarme a otro lugar, a seguir formándome y
mejorando, a no trabajar de lo que me gustaría,...pero ni por esas. No hay, la
burbuja estalló.