El pasado lunes hubo Pleno en Pozoblanco, pero no un pleno en el que se debate ideológicamente si esto me parece bien y esto otro mal. Fue un pleno en el que cada uno intervenía cuando y de la forma que le daba la gana. Hasta el público, que tan sólo tiene un papel de observador, escuchando y debiendo mantenerse en silencio se metía en el jaleo.
En mi opinión, al alcalde se le hace grande dirigir el pleno, o no se los prepara o le ha salido gata ser bondadoso con la No Adscrita y el poder que le dio en su día, ahora no sabe como quitárselo.
La tan discutida moción de IU, no por su contenido que quedó en un segundo plano, al final se aprobó porque lo que ponía en ella era bueno para Pozoblanco, y hubiera sido "penoso" que ni eso se aprobara.
Lo que está claro es que no puede suceder que los concejalas no respeten al Alcalde y Presidente del Pleno y que se salten los turnos de intervención cuando les venga en gana, pero tampoco puede ser que el Presidente siga sin saber cortar el pitorreo.
Lo de la vara de mando es por algo
Hay un dicho que dice:
Más vale ponerse una vez colorado que ciento amarillo
